En los últimos diez años me he dedicado a la docencia y siempre he sido miembro del grupo entusiasta, al grupo que le parecía que la balanza que se encarga de comparar la cantidad de aspectos positivos y negativos de esta bendita profesión, se inclinaba claramente hacia el lado positivo. Sin embargo en esta semana y por primera vez en mi vida laboral esta frase se me ha cruzado, vilmente, por mi cabeza: yo dejo la docencia.
Hoy estoy harta , para decirlo educadamente, harta de aguantar a chicos maleducados y consentidos, harta de intentar motivar a chicos que no les importa nada, apáticos; harta de aguantar a algunos padres, que defienden lo indefendible,; harta de aguantar a los compañeros que confunden las labores de tutoría con el amiguismo y el compadreo; harta de trabajar ahoras que corresponden a mi familia;harta de pasar por el patio y aguantar el comentario de la mamá de alguno de loa amiguitos de mis hijos que me suelta eso de -«¡pero que bien viven los profesores!-;harta de las horas interminables de evaluaciones; harta de la primavera y de las alergias que trae;harta de poner rayitas en las hojas de notas; harta de las clases en las que todos te miran con cara de haba como si les estuviese hablando en arameo; harta de perder el tiempo en lugar de aprovecharlo; harta del «sientate», «silencio» y el «pero, ¿nadie ha hecho los problemas?;harta de no tener tiempo para escribir en este blog ni para leer lo que me interesa; vamos, resumiendo, que estoy bastante harta.

No quiero que nadie me anime, no se trata de eso. Mis compañeros dicen que «me tomo las cosas a pecho» , y yo no lo niego, pero me temo que no es que no pueda cambiar sino que a estas altura de mi vida no quiero cambiar, y ahora que lo pienso, también estoy harta de que me digan eso.

Y.. ya está. Si alguien sabe de algún trabajo para una informática le agradecería mucho que me lo comunicara.

ACTUALIZACIÓN

Nota a mis alumnos: En vista de que alguno se ha asomado por aquí (un hecho que hasta la fecha me resultaba insólito) quiero aclararles que NO me voy, sólo estaba expresando mi estado de ánimo y que el examen de la semana que viene SIGUE en vigor. ¡Así que venga, majetes! a estudiar que nos quedan dos colacaos para terminar el curso.