Alejandro Valero me acaba de pasar un meme para que describa dos actividades que me han funcionado en el aula. Actividades funcionan muchas pero es verdad que unas funcionan bien y otras son un verdadero fracaso. Este año me quedo con la experiencia de haber usado el moodle en mis clases de Tecnologías de la información: ha sido, mejor dicho, esta siendo un éxito de público y crítica y cada día que pasa estoy más contenta de haber pasado a este medio. Mi evolución dentro de mis clases de Tecnologías de la Información (1º de bachillerato) la puedo describir en tres fases:
- Manuales en papel, a los que yo «cariñosamente» siempre les he llamado guía-burros (y que no se me ofendan los burros, por favor). En estos manuales que elaboré poco a poco y con mucho paciencia, indicaba paso a paso cada una de las actividades que tenía que realizar el alumno para adquirir las destrezas mínimas en el uso de un programa informático completo. Dichos manuales los completaba con numerosas actividades al final de cada lección para que aquellos alumnos más aventajados pudieran ir a su ritmo sin que me «estresaran» a los más lentos.
- Apareció la red de redes y las infinitas posibilidades. En concreto monté una página web que más tarde pasé a Xoops y en la que las prácticas se podían leer en cada ordenador sin tener que pasar por la impresora. Las ventajas que introdujo el nuevo sistema fueron muchas pero me quedo con el adiós que le dije a las fotocopias y a los manuales que se quedan obsoletos en cuanto cambiaba de versión el programa en cuestión.
- Este año he ido migrando poco a poco a Moodle. ya lo he comentado en otras ocasiones pero no me importa repetirlo: adoro Moodle, me he convertido en una moodle-adicta. Me aporta una serie de ventajas sobre los otros sistemas que no tiene precio: control total del alumnado, exámenes tipo test, foros, compartición de ficheros, etc,etc.
Bueno Alejandro, no se si he contestado correctamente al meme pero intenta ser benévolo conmigo: es el segundo al que contesto ya que, aunque el primero me lo pasó Lourdes y aún lo sigo llevando a la práctica añadiendo a las chicas blogeras a mi sección de enREDadas, no escribí ninguna entrada.
Te pongo un 10 por tu trabajo, Charo, y propongo a tu jefe que te aumente el sueldo. Pero, si no te importa, me gustaría saber qué tal se porta el pingüino Tux en tus clases, cómo has conseguido adaptar Linux a tu trabajo diario. Sólo eso para matrícula.
Bueno, yo siempre voy a por la matrícula, así que prometo contar más despacio cómo he cambiado todo el proyecto curricular para adaptarlo a Linux y al software libre en general. En realidad ha sido fácil: se trata de hacerlo del tirón, cómo cuando uno se tira a la piscina. En la práctica es mucho más sencillo que en la teoría y a medida que pasa el tiempo estoy cada vez más convencida de que, al menos en educación, el software libre tiene futuro. Además,en esta vida hay que apostar, y yo he apostado por Linux y el software libre.